Santuarios

Tienes que ir hasta el final

Si decides hacerlo, si vas a intentarlo, tienes que ir hasta el final; de otra manera, no inicies nada. Seguramente encontrarás heridas, sombras, fantasmas. laberintos y otras hierbas en el camino, pero no te olvides ir hasta el final.
Tal vez suponga extraviarte en el tiempo, abrigarte de soledades, quizá el viento te horade los sentimientos o te quedes petrificado en la espera del otoño, no vaciles y ve hasta el final.
La lucha diaria en cosas pequeñas, te fortalece para cumplir los retos, nunca debes abandonar los retos, no te debes dejar llevar por el estado de ánimo de ese día o de ese momento. Corrige formas, tiempla el carácter o añade a tus actos una dosis de humor, pero siempre debes ir hasta el final.
Defiende tus ideas, tus principios y valores hasta el final; tienes que poner a prueba tu resistencia a pesar de la discriminación, el aislamiento, la burla o cualquier otra estupidez humana. Aunque tengas mínimas posibilidades de plasmar tus ideas, debes luchar hasta el final.
Si vas a intentarlo en el amor, ve hasta el final. En esa perspectiva estarás en contacto con la tribu. Y la humedad de las horas te abrazará en el tiempo. Estarás a solas con los ritos, los espejos...en el laberinto de los caminos, los adioses y los retornos...
Victorias y derrotas te acompañarán en el camino, caer y levantarse será una constante, recomenzar siempre...,Ese es el reto, esa es la lucha, para avanzar se necesita un amor vigilante a toda prueba.

Que tu aliento sea hasta el final, hasta abrazarte a la esperanza, claro; aunque el amor no esté de tu lado o la paz sólo sea un recuerdo y tu fe se asemeje a una caricatura, hasta el final tienes que intentar abrazarte a la esperanza, de la que no debes apartarte jamás. Sólo así llevarás las riendas de la vida hasta el paradero final, hasta el instante último, casi sísmico, de la labor cumplida. Esa es la única lucha que dignifica al hombre, cualquier cosa intermedia, simplemente es una parodia humana.