Esa Ineludible Tarea de Existir

Esa Ineludible Tarea de existir
Experimenta la Maravilla de haber nacido y de crecer. Y haz que cada día, cada hora, cada momento sean nuevos y únicos para tí. Sé consciente de los límites de tu oficio de SER persona. Acéptate como eres, pero sueña con lo que puedes ser para mejorar y trabaja para llegar a serlo. Sé sincero y transparente. PERO por sobre todas las cosas sé LIBRE....
Obra con la libertad de Dios, esa de quienes no tienen "nada que perder" ni "nada que ganar" y a la vez... "todo por hacer".
Comparte cuanto tienes con los demás: Regala tú tiempo y tú alegría, contagia tú ilusión y tú esperanza, siembra siempre el buen humor....No envidies la suerte de nadie ni te dejes corroer por la envidia...Tú en cambio, sé generoso y desprendido en ideas, acción y corazón.
Conserva tu capacidad de asombro ante todo lo creado. Vive intensamente cada día:
como si fuera el primero,
como si fuera el único,
como si fuera el último.
Dá Gracias a Dios todos los días de tu vida.
Y cuando llegue la noche, haz exámen de conciencia: Mirá lo bueno que haz hecho y felicítate por ello...Y nunca olvides de sembrar más AMOR cada día.

No sé... si la vida será corta o demasiado larga para ti, mas sé que nada de lo que vivimos tiene sentido, si no tocamos el corazón de las personas. Muchas veces basta ser: Mimo que abraza, brazo que envuelve, palabra que conforta, silencio que respeta, alegría que contagia, lágrima que corre, mirada que acaricia, deseo que sacia, amor que conmueve. Y eso no es cosa del otro mundo, es lo que da sentido a la vida. Es lo que hace que ella no sea ni corta, ni triste, ni solitaria, ni demasiado larga; sino que sea intensa, verdadera, pura... mientras dura...